10 de abril de 2010

Nido de locura

Esta ciudad está llena de grandes genios.

Me baso en la cantidad de locos que veo a mi alrededor. Lo que entendemos hoy por hoy como locura, ya se sabe, cuando ves a la gente hablando sola por la calle, haciendo gestos incomprensibles, balbuceando sinsentidos, esos que te miran con ojos idos fijamente en el autobús, o sencillamente, encontrarse a un sujeto, digno de psiquiátrico, pero ¡eh! con camisa de fuerza incluida, con una olla llena de un potingue blanco en un vagón del metro, esparciéndolo por doquier... sí, ese tipo de locura.

Esta no es una ciudad rápida, no es el estresante mundo de las grandes ciudades pero noto que hay falta de comunicación, es decir, bajo mi propio criterio por supuesto, estamos a caballo entre esa falta de vida que crea en el primer mundo unas personas rápidas, egocéntricas, exigentes y vacías con esa familiaridad, cercanía, inocencia e inocuidad de un pueblo del interior. Veo a menudo rostros gastados, cansados y tal vez mucha indiferencia. Me encanta observar esas miradas idas, perdidas, pensativas, despiertan en mí esa curiosidad innata. Es un mundo diferente, gente diferente.

Nunca acabaré de sorprenderme con la raza humana, nunca dejaré de observarla, o al menos, así lo espero.

Good Night, Montreal.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

He llegado a tu blog por casualidad, fruto de algunos instantes de aburrimiento y otros tanto de curiosidad. He llegado por casualidad, pero no me he quedado enganchado por ella, si no por tu forma de contar. Seguramente yo seria un sujeto de esos dignos de psiquiatrico, no por llevar ollas con potingues blancos (prefiero no saber qué es) si no por la obsesión de leer una buena pluma anonima. Bajo esa obsesión, espero que seas periodista o algo así, para que no dejes de escribir y contar las cosas más sencillas de la manera más fácil. Enhorabuena. Un saludo desde Valencia. KOKE.

Yhadax dijo...

Wow, curiosamente me dejas sin palabras. No soy periodista, nada más lejos de la realidad, tan solo me gusta escribir de vez en cuando mis reflexiones y observaciones. Muchas gracias por los halagos y sepas que siempre serás bienvenido, Koke. Saluda a Valencia de mi parte, tengo demasiado por allí :)